Caso Roseo: Del Corro aseguró que «las cosas siguen igual o peor que hace 10 años”
En declaraciones a Diario Castelli Online, el abogado de la familia, Carlos Del Corro, aseguró que “el crimen tuvo desde el principio, todo el aspecto de ser por encargo, y de estar manipulado desde altas esferas del poder político, provincial y nacional”.
Del Corro relató la sucesión de obstáculos e impedimentos que debieron afrontar desde un principio en todos los planos para lograr la filiación definitiva de los herederos Lucía y Emanuel Roseo Cuellar. “La resistencia y oposición del Estado Chaqueño a reconocer que los únicos herederos de Manuel Roseo eran los dos hijos, no terminó con la demostración científica de paternidad aportada por los Hospitales Durand, y el Instituto Favaloro; al contrario, se agudizó la que se convirtió en una guerra del Gobierno del Chaco contra los hijos de Roseo, implementando el gobernador Capitanich, el más cruel de los abandonos de persona que se conocen en la historia del Chaco, negándoles incluso la asistencia médica que con urgencia requería el estado de salud de Emanuel que padecía una enfermedad con peligro para la vida del niño si no se lo atendía”, aseguró.
Por otro lado, sostuvo que “la guerra desatada tenía como fondo apropiarse de La Fidelidad, asfixiando a la familia económicamente para obligarla a transar con el gobierno a moneda de quiebra, estrategia que subsiste hasta ahora, y que aplica todo el poder que tiene sobre fiscales y jueces, para vulnerar los derechos de propiedad, en el juicio de expropiación, que es un simulacro de juicio con una verdadera “bajada de línea”, política a funcionarios judiciales, para que demoren el proceso y no determinen nunca el verdadero valor de La Fidelidad que es a la fecha $ 26 mil millones de pesos”. Finalmente, sentenció que “las cosas siguen igual o peor que hace diez años cuando mataron a Manuel Roseo, y la corrupción de los gobiernos peronistas, macristas etc. es la misma”.
En lo penal, la justicia chaqueña condenó a prisión perpetua a Luis “Gusano” Menocchio, Claudio Gómez y Salvador Borda, considerados autores del doble crimen. Al respecto, el abogado Del Corro aseguró que “la justicia se apresuró a condenar a tres sicarios, dejando fuera de todo cuestionamiento a los autores intelectuales a los cuales la fiscal Juana Rosalía Nis, no quiso investigar, sepultando las listas de llamadas entrantes y salientes de la antena de celulares de Castelli, que ofrecía la prueba esencial para capturar a los partícipes intelectuales de la masacre”.
