Para la Policía y la Justicia está prácticamente esclarecido el femicidio de Johana González. El detenido y acusado por el femicidio Mario Barrientos la mató el mismo día que fue vista con vida por última vez por su madre el 21 de mayo en la casa que alquilaba en Villa Seitor. Desmembró el cuerpo y arrojó los restos el viernes 31 en la laguna ubicada a metros de donde vivía.
El acusado se entregó el domingo en Corrientes luego de autolesionarse en las muñecas para intentar suicidarse y producto de las heridas debió ser hospitalizado. Una vez en condiciones, este martes fue trasladado a Resistencia y está alojado en la división Investigaciones.
Autoridades policiales brindaron una conferencia de prensa donde dieron algunos detalles vinculados al trabajo que continúa en busca de restos de la víctima (se realizaron allanamientos en el domicilio que alquilaba y máquinas pesadas inspeccionan en las lagunas) a lo que se agrega que el hombre con quien González tenía una relación sentimental pintó las paredes del inmueble para ocultar evidencias o rastros de lo que fue el destrozo del cuerpo de la víctima.