El Sebilar: Una pequeña comunidad olvidada en medio del monte Impenetrable

Son alrededor de 30 familias conglomeradas en un alejado rincón en medio del monte Impenetrable. El Cebilar está a 80 kilómetros de la localidad de El Sauzalito, y jurisdiccionalmente pertenece a ese municipio. Allí residen desde hace 25 años en medio de grandes adversidades y sometidos a numerosas carencias básicas. La mayoría de las familias pertenece a la etnia wichi, aunque también conviven con pobladores criollos arraigados en el lugar.

Todas las precarias casas construidas con madera y plástico conformando una especie de barrio situado en el medio del monte. Las familias aprovechan los recursos naturales y realizan harina de algarroba que durante la época de verano cosechan para guardar y tener durante el año para alimentarse. Además, realizan artesanías con chaguar para tener algún ingreso mínimo y poder sobrevivir.
Cuando comenzamos a escuchar sus necesidades, expresaron que viven prácticamente en el olvido, con carencias básicas y que ningún funcionario se acerca a escuchar sus reclamos o atender sus necesidades. “Nosotros tomamos agua de un pequeño aljibe de la escuela, pero en estos momentos está sin agua, y tenemos que acarrear desde el río para el consumo de la comunidad”, asegura “Tito” González, un antiguo poblador del lugar que nos acompañó a recorrer su pequeña comunidad.
“Tito” describió que están olvidados por las autoridades, que las familias realizan sus trabajos de artesanías con chaguar para sobrevivir y que están necesitando de manera urgente una perforación para tener agua para el consumo. Gracias a su organización en comunidad, pueden realizar tareas comunitarias para sobrellevar distintas situaciones y ayudarse mutuamente entre familias.
EL PEDIDO DE LA COMUNIDAD
En una reciente nota enviada al Gobernador Jorge Capitanich, la comunidad del paraje El Cebilar le planteó las necesidades más urgentes para las familias que habitan el lugar. Entre ellas, le pidieron un generador eléctrico para abastecer a las casas ya que algunas solamente cuentan con pequeños paneles solares, y solicitaron la provisión de agua potable ya que la comunidad utiliza agua del río para el consumo, o de una pequeña aljibe de la escuela que en estos momentos está sin agua.

También, solicitaron el servicio de internet para el anexo escolar N° 873 para que sus hijos tengan acceso a la educación y para la comunidad ya que prácticamente viven incomunicados; como así también solicitan una sala de primeros auxilios. Finalmente pidieron la construcción de 25 viviendas para las familias y la entrega de tierras con títulos de propiedad para los habitantes.
*Por Mario Acevedo ( Periodista y docente de El Sauzalito) para Diario Castelli Online