Renunció el fiscal Lucio Otero: había denunciado “aprietes” y “amenazas”
El viernes el fiscal número 13 Lucio Otero (46), especializado en delitos informáticos y uno de los integrantes del Equipo Especial dedicado a las causas que involucran a exfuncionarios o funcionarios acusados de corrupción contra el Estado, decidió dar un paso al costado.
Otero está de licencia desde comienzo de abril, días antes del juicio contra Roberto Lugo, exministro de Desarrollo Social: el dimitente fiscal pidió tomarse un descanso. El debate de hecho se puso en marcha en la Cámara Tercera en lo Criminal, únicamente con Graciela Griffith Barreto representando al Ministerio Público.
NORTE pudo confirmar, con calificadas fuentes, que Otero se aleja del poder judicial, y mañana el procurador general elevaría el pedido al Superior Tribunal de Justicia (STJ) para resolver si acepta el portazo del investigador de grooming, una faceta que desarrolló en las más altas esferas, con conexiones no solamente en Argentina, sino también de gran proyección con Estados Unidos y Europa.
RAZONES
Las razones que aceleraron la salida abrupta del fiscal que investigó al exsecretario general de la gobernación Horacio Rey y Gustavo Katavich (exmiembro de Fiduciria del Norte), ambos condenados a siete años y cinco años de prisión, se centran en su decisión de un horizonte laboral prometedor, indicaron las fuentes a este diario, con mejores ingresos si se comparan con los devaluados salarios de los jueces, fiscales y empleados judiciales.
También una supuesta tensión con el procurador general adjunto Miguel Fonteina, luego de que el número dos del Ministerio Público le pidiera que denuncie los supuestos hechos de “aprietes” y “amenazas” que según Otero habían sufrido junto con Griffith Barreto y Villaba durante la investigación de la denominada causa Fappo.
Los sucesos que causaron un cimbronazo en la estructura judicial fueron revelados por NORTE, luego de que Otero lo expusiera en su cuenta de Twitter, el día posterior a conocerse la sentencia condenatoria a Rey y Katavich, con absolución de Paulo Buticce e Ismael Fernández.
El derrotero a partir de sus expresiones, que en los días siguientes tuvo que aclarar ante un aluvión de manifiestos, con muestras de solidaridad para Otero, pero también dejándolo casi en el banquillo, habría sido la razón principal de su renuncia.
Acerca del futuro laboral del fiscal 13, pasaría por lo académico en un Centro de Estudios Judiciales, con un amplio abanico de posibilidades, pero antes el STJ deber aceptarle la renuncia.
Fuente: Norte Digital
