Embajadores argentinos cobran el doble que sus pares de países vecinos

Hay unos embajadores de carrera y otros designados políticamente por el Poder Ejecutivo, con aprobación del Congreso. Estos últimos son un tercio del personal, mientras que en todas las sedes hay puestos que solo pueden ser ocupados por los diplomáticos profesionales.
Las designaciones del Ejecutivo en las embajadas muchas veces funcionan como premio consuelo para quienes perdieron peso político en el ámbito local. Un ejemplo es el de Marcela Losardo, socia del presidente que debió alejarse del Ministerio de Justicia por presiones internas en el Frente de Todos y ahora es embajadora en la UNESCO. El economista Guillermo Nielsen, que dejó su cargo en YPF, ahora está en la embajada argentina en Arabia Saudita.
El premio consuelo viene con unos salarios muy atractivos. Según TN, Losardo y Nielsen cobra alrededor de u$s 18.500. Daniel Scioli, que pasó como un suspiro por el Ministerio de Desarrollo Productivo, volvió a la embajada en Brasil, a cobrar unos u$s 17 mil mensuales.
Categorías
Los sueldos dependen de la categoría que diplomáticamente se asigna al país de destino y de un coeficiente relacionado con el costo de vida en ese lugar. La última escala salarial vigente, que será reactualizada el mes que viene, va desde los u$s 17.300 hasta los u$s 23.600.
Los exministros Rafael Bielsa, en Chile, y Carlos Tomada, en México; el radical Ricardo Alfonsín, en España; el embajador argentino en China, Sabino Vaca Narvaja; figuran entre los designados políticamente. Los tres primeros están en el rengo de los u$s 17.000, mientras el hombre de Pekín cobra casi u$s 22 mensuales, igual que el representante en Israel, Eyal Sela, un profesional con larga y calificada carrera en el servicio exterior israelí.
Atados a los sueldos judiciales
Los sueldos más altos son los de los embajadores en Signapur y Líbano (u$s 23.629 y u$s 23.412, respectivamente); Japón (u$s 22.545) y Suiza (u$s 22.212). Estas embajadas son consideradas «complejas» por el costo de vida y están ocupadas por diplomáticos de carrera. Sus salarios, entre impuesto a las ganancias y descuentos jubilatorios, pueden reducirse hasta un 40%.
Los sueldos de u$s 17 mil a u$s 23 mil no están determinados por el gobierno, sino atados por ley a los de la Procuración General de la Nación: se actualizan por paritarias judiciales y se les agrega un coeficiente relacionado con el costo de vida en el sitio de destino. De todos modos, los embajadores argentinos están entre los mejor pagados de la región, superando a uruguayos, brasileños, chilenos y hasta estadounidenses. Nisiquiera hay algún presidente sudamericano que gane lo que un embajador argentino.
El presupuesto de las embajadas
El informe de TN dice que el gasto anual en alquiler de residencias diplomáticas se aproxima a los u$s 21 millones. En 2022 es u$s 700 mil dólares más alto que en 2020 y 2021. El presupuesto total de la Dirección del Servicio Exterior -entre los gastos normales y extraordinarios- fue en 2020 (156 sedes activas) de u$s 73 millones y en 2021 de u$s 74 millones y medio (160 sedes activas). Este año se proyectan u$s 80 millones.
Los destinos que atraviesan situaciones particulares reciben desembolsos especiales: la embajada argentina en Ucrania (país en guerra), o la de Qatar (mundial de fútbol) han visto reforzados los presupuestos, por ejemplo.